martes, 26 de noviembre de 2013


 


HARVARD









Estaciones saludables 

Hace ya un tiempo empezaron a verse en Buenos Aires, por suerte, las estaciones saludables.
Durante mi estadía en Harvard encontré y probé unas estaciones saludables diferentes.
Como ven en las fotos, estoy realizando unos pequeños ejercicios.
¿Se me ocurrieron a mí?
¡No! Si miran en la parte inferior de la escalera, hay una franja blanca, en la que figuran algunos ejemplos de ejercicios. Sólo hice lo sugerido.
Ahora bien, si me encuentro con nuestras estaciones saludables no hay una guía de ejercicios.
De todas maneras podemos animarnos a probar, y quizás ¡hasta inventemos alguno nuevo!

¿Son útiles las estaciones saludables?
Claro que sí.
En primer lugar, porque son vistosas, llaman la atención, despiertan nuestra curiosidad y nos invitan a probarlas. Todo lo que nos genere movimiento, bienvenido sea.
En segundo lugar, porque es bueno y necesario desarrollar nuestros músculos.
Por ejemplo, combinar una caminata con una estación saludable, es una excelente opción para desarrollar nuestra capacidad aeróbica y nuestra fuerza muscular.

De todas maneras, esta combinación también puedo hacerla sin estaciones saludables.
Con unos simples ejercicios, podemos desarrollar la fuerza con el peso de nuestro propio cuerpo.

Pensemos lo siguiente...nuestros músculos necesitan tener cierto nivel de fuerza para, solamente, mantenernos erguidos, deben sostener nuestro esqueleto.
Si salimos a caminar, nuestros músculos van a necesitar estar un poco más fuertes, para poder sostener nuestro esqueleto cuando nos desplazamos.

¡Es fácil y no requiere mucho tiempo!

En la próxima entrada daremos algunos ejemplos en nuestras estaciones saludables.
Si tienen dudas o inquietudes pueden consultarme...
¡Ci vediamo!

viernes, 1 de noviembre de 2013

La actividad física y nuestro cerebro


Hoy, gracias a la neurociencia, conocemos más cómo funciona nuestro cerebro.
Hasta hace un tiempo se creía que la actividad física sólo era para desarrollar nuestras capacidades, nuestros músculos, cómo si nuestro cerebro no fuese parte nuestra.
Afortunadamente, hoy, sabemos que no es así.

Pasan muchas cosas buenas en nuestro cerebro cuando nos movemos.
Estanislao Bachrach, explica en su libro "Ágil mente", que a la actividad física se la llama "caramelo cognitivo". Hay estudios que demuestran cómo la actividad física incrementa el volúmen de sangre en distintas regiones del cerebro.
También estimula la producción del factor neurotrófico, que mantiene las neuronas jóvenes y sanas.
Estimula la neurogénesis, es decir, la producción de nuevas neuronas.

¡Y por supuesto, las tan conocidas endorfinas!
Ellas son las que nos dan sensación de placer.
Así que si empezaste alguna actividad física y te sentís mejor, más optimista, más positivo, con la mente más abierta ya sabés a qué se debe.
Y si no empezaste, te propongo que pruebes con 20 minutos, o 10 o lo que quieras/puedas.
¿ Después me contás cómo te fue?

En nuestro organismo, en nosotros, pasan muchas cosas más cuando hacemos ejercicio físico. Estas son algunas, las demás las dejamos para la próxima...

¡Buon fine di settimana a tutti!